Hace más de 50 años un “buldó” y una “rastra“ de las tradicionales moscas ahogadas hicieron el milagro de traer a mi mano una trucha de muy escasos 19 centímetros. La primera de mi vida. Entonces me pareció un trofeo, y aún hoy sigue siéndolo en mi memoria.
Hace veintisiete años me inicié en la pesca con sedal pesado, y al poco empecé a desarrollar un interés especial por el lanzado: había descubierto que seguir montando mosca tras mosca sin prestar atención a cómo presentarlas correctamente, no era una buena idea.
Desde entonces he estado estudiando en profundidad la mecánica del lanzado a mosca, y preparándome de la mano de instructores de prestigio internacional como Alejandro Viñuales, Carlos Azpilicueta, Bernd Ziesche o Jason Borger. Administré durante años el foro Sexyloops en castellano, y he participado activamente en foros de lanzado internacionales.
Obtuve mi primer título de instructor con el programa PAIL de AEMS en 2006, y superé el examen Casting Instructor de la Federation of Fly Fishers en 2009.
Llevo más de veinte años enseñando a lanzar a mosca a cientos de pescadores de todos los niveles, tanto por mi cuenta como en colaboración con otros instructores de prestigio internacional.
Mi trabajo figura como recomendado en la lista oficial de materiales de estudio para la obtención del título de Master Casting Instructor de la organización Fly Fishers International.
En España escribí artículos para la revista Danica y Trofeo Pesca. Actualmente colaboro con la publicación impresa británica Fly Culture Magazine y con la revista digital A mosca.
He traducido al castellano tres libros relacionados con la pesca a mosca: El lanzado a mosca y Defectos y correciones de lanzado a mosca (ambos de Ed Jaworowski) y La presentación en la pesca a mosca, de Gary Borger. Más recientemente colaboré en la corrección de pruebas del enciclopédico Single Handed Fly Casting de Jason Borger.
He tenido la suerte de poder disfrutar de la pesca en España, Francia, Alemania, Italia, Noruega, Eslovenia, Croacia, Bosnia, Polonia, Estados Unidos, Argentina, Australia, Nueva Zelanda, Maldivas y Zambia.
Si alguien me pregunta qué es la pesca a mosca, lo primero que me viene a la mente —sin despreciar otros escenarios y especies—es un río calizo de corrientes laberínticas, truchas comunes y tímalos cebándose a efémeras diminutas, una caña #3 ó #4 y un largo bajo con un terminal de 0,10 mm empatado a una emergente del #22; añádase a la mezcla un buen compañero de pesca… y eso es el nirvana.
Aitor Coterón Agorria
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